El Observatorio de la Sostenibilidad de Fundación Cristina Enea lleva siete años realizando un estudio de la evolución de la ciudad en claves de sostenibilidad. Un trabajo de análisis y reflexión en el que se contrastan los datos e información de cada año con series históricas de años anteriores, mostrando la evolución de los diferentes vectores ambientales, económicos y sociales.
De esta forma, se acaba de publicar el Informe Anual de Sostenibilidad de San Sebastián con los datos relativos a 2014. Este documento diagnostica el estado del municipio a través de un panel de 48 indicadores, organizados en 15 apartados, analizando su evolución temporal y reflexionando sobre los datos obtenidos. Además, el informe incorpora una visión de género mucho más precisa en aquellos aspectos en los que se ha podido segregar la diferente presencia de mujeres y hombres, además de un indicador sobre el número de Entidades Colaboradoras en igualdad de oportunidades.
Mostrar/Ocultar 
Las cifras de 2014
El número de consulta ciudadanas sigue creciendo año tras año, aumentando un 10 % en número respecto a 2013, alcanzando la cifra de 10.838. Un número importante de consultas se centran en cuestiones como el contenedor de recogida de materia orgánica, el compostaje comunitario y doméstico, el proyecto de huertas públicas, el ruido o cuestiones relacionadas con la movilidad ciclista recogidas en el Observatorio de la Bicicleta.
En lo que se refiere al consumo responsable, se mantiene el número de actuaciones, 24, con un presupuesto inferior a 2013 (94.553 € frente a 112.346 €). Continúa la progresiva implantación de sistemas de gestión ambiental en actividades públicas y privadas (obtención de 3 nuevas certificaciones, dos de ellas en instituciones públicas). La tasa de «compra verde» de material fungible que realiza el Ayuntamiento sigue siendo elevada (88 % del presupuesto de material fungible es «compra verde»), y se mantiene en niveles parecidos el número de productos fungibles considerados como de «material verde» que se adquiere, que viene a representar el 88 % de las referencias. Se sigue incrementando el número de pliegos de contratación pública en los que se ha introducido criterios de sostenibilidad, siendo en 2014 un total de 18 los pliegos ambientalizados. La Instrucción municipal existente desde junio de 2013 para incorporar criterios sociales, ambientales, éticos, laborales y de igualdad en la contratación del Ayuntamiento está suponiendo que también se incorporen estos criterios en la contratación municipal.
Los índices de calidad del aire de las estaciones de Avenida de Tolosa, Ategorrieta y Easo alcanzan el 99 % (porcentaje de días de calidad «buena» o «admisible», superior a 2011, último año con registros suficientes capturados para poder calcular el índice de calidad de aire de estas estaciones). Las medias diarias y las superaciones de valor límite diario de partículas PM10 no superan los valores límite que establece la legislación en las tres estaciones mencionadas. Las medias anuales y las máximas horarias diarias de NO2 no superan los valores límite que establece la legislación en ninguna de las cuatro estaciones del municipio (Avenida de Tolosa, Ategorrieta, Easo y Puyo).
Con respecto a los resultados obtenidos en 2014, en el ámbito de la movilidad, sigue incrementándose el uso de la bicicleta. La media diaria de desplazamientos en bicicleta ha sido de 18.026, –suponiendo 6.579.490 los desplazamientos efectuados en bici este año–, representando un incremento del 8 % respecto a 2013. Sigue siendo muy importante el número de personas que utilizan el transporte público en sus traslados por la ciudad, contabilizándose un total de 30.832.327 viajes efectuados en el interior de la ciudad mediante Dbus, Lurraldebus o EuskoTren. Se recupera el número de viajes en Dbus, un incremento del 2 % respecto a 2013 (28.077.701 viajes). Se estabiliza el índice de motorización, con un descenso del índice de motorización de turismos (400 turismos por 1.000 habitantes, descenso del 1,13 %) y de las motocicletas (140 vehículos por 1.000 habitantes, descenso del 0,27 %). Los viales acondicionados para la circulación ciclista han alcanzado los 65 km, habiéndose habilitado 4.740 metros más, siendo 1.610 metros los que corresponden a vías ciclistas segregadas.
Uso de la bicicleta: No de desplazamientos al día
Mostrar/Ocultar 
Fuente: Departamento de Movilidad del Ayuntamiento de San Sebastián; Observatorio de la Bicicleta.
Por otra parte, continúa el descenso del consumo total de agua (211 litros por persona y día, representando un 0,35 % menos que en 2013, mientras que el consumo doméstico ha sido de 141 litros por persona y día, inferior a años anteriores). Se mantiene la reducción progresiva en el volumen de agua no facturada, que representa un 3 % menos que el año anterior y un 14 % sobre la demanda total de agua del municipio. El agua perdida sigue representando el 8 % de la demanda total de agua del municipio. Por otro lado, los análisis de la calidad del agua del Urumea permiten observar una creciente mejoría en las zonas más cercanas a la desembocadura y en la costa (sube la calidad en Santa Catalina, pasando a un nivel más alto, Aguas en Muy Buen estado, y se mantiene la calidad en Mompás, Muy Buena); no obstante, las analíticas realizadas en la zona media del río, entre los puentes de Loiola y Santa Catalina, muestran que persisten descensos en los índices de la calidad de esta agua (se mantiene la clasificación en Loiola, Deficiente). En Ergobia sigue situándose en el nivel alcanzado en 2013, Aguas de alta calidad, tras el descenso de 2012.
En el ámbito de los residuos, siguiendo la tendencia de años anteriores, se reduce la cantidad global de los residuos producidos (un 5 % menos que en 2013, representando una generación de 1,19 kg de residuos por habitante y día). Baja la tasa de recogida selectiva de residuos (36 % de residuos recogidos selectivamente sobre la cantidad total de residuos generados en 2014 frente a 38 % en 2013), si bien es cierto que en la cifra de 2013 tuvo una influencia determinante la gran cantidad de maderas y residuos verdes acumulados en el vertedero de San Marcos, y supone un incremento de 3 puntos respecto a los años 2012 y 2011. Se han recogido selectivamente 0,42 kg de residuos por habitante y día, y desciende en un 1 % los residuos llevados a vertedero, representando 0,77 kg/habitante/día, la cantidad más baja de los últimos 12 años. Durante 2014, la recogida de la materia orgánica mediante contenedores específicos se ha ampliado a toda la ciudad. Un total de 17.807 familias y 1.348 establecimientos de diverso tipo participan en el sistema. La materia orgánica recogida ha alcanzado los 2.143.480 kg. Además, 850 hogares disponen de compostador individual y 82 familias participan en los programa de compostaje comunitario habilitado en barrios.
Tasa de Residuos Urbanos: kg/habitante/día
Mostrar/Ocultar 
Fuente: Mancomunidad de San Marcos.
En lo que respecta al consumo y producción de energía, el consumo eléctrico ha descendido por quinto año consecutivo (un 1 %), representando el consumo medio anual 3.739 kWh por habitante; el consumo de gas se reduce en un 14 % (3.584 kWh por habitante al año). Continúa aumentando la capacidad instalada de energías renovables, alcanzando una capacidad de 7.097 kW. El incremento se ha producido sobre todo en instalaciones de biomasa y geotermia. No obstante, la producción energética proveniente de fuentes renovables ha descendido debido a la disminución del biogás procedente del vertedero de San Marcos, en proceso de cierre. Se ha estimado una producción de 5.703.179 kWh, que viene a representar un descenso de 16 % respecto a 2013.
El inventario de emisiones de CO2, cuyos últimos datos corresponden a 2013, muestran un descenso del 17 % respecto a 2005 y del 22 % respecto a 2007 (año base para el Plan de Energía Sostenible); las emisiones por habitante suponen 6,9 toneladas de CO2 equivalentes en 2013.
En el ámbito social, persiste el crecimiento de los índices de paro (12,7 % tasa paro total en 2014, misma que en 2013; 14,2 % tasa de paro femenino en 2014, 13,2 % tasa de paro femenino en 2013) y 4.871 familias son perceptoras de la Renta de Garantía de Ingresos, que viene a suponer que el 6,4 % de las familias del municipio son perceptoras de estas ayudas. Por otra parte, los servicios sociales atienden, con diferentes niveles de intensidad, al 40 % de la población mayor de 65 años, 16.691 personas, el 23 % de la población, alcanzando una cobertura del 72% en las personas mayores de 85 años.
El informe está disponible en la página web de Fundación Cristina Enea Fundazioa: www.cristinaenea.org/informe-sostenibilidad.
Evolución positiva pero insuficiente
Los datos obtenidos en 2014 presentan una evolución positiva de los principales parámetros ambientales, si bien persiste los aspectos más negativos de la situación de crisis por la que transitamos: el paro y la situación de muchas familias con necesidades de ayudas y prestaciones sociales, elementos claves de atención y respuesta en claves de sostenibilidad y cohesión social.
Durante el pasado año, impulsado por la Dirección de Medio Ambiente del Ayuntamiento, se ha vuelto a diagnosticar la situación ambiental del municipio, diseñándose un nuevo Plan de Acción Ambiental, que alcanza en este caso el horizonte de 2020 y que ha permitido configurar una Estrategia Ambiental en forma de retos y metas con la mirada puesta en el año 2030.
Uno de los retos fundamentales de esta Estrategia municipal es actuar frente al cambio climático, reduciendo las emisiones de CO2. Un problema de alcance global pero en el que las soluciones son, ante todo, locales. Y ésta es la visión y compromiso que ha guiado la acción municipal del Ayuntamiento desde que hace una década firmara la Carta de las Ciudades Europeas hacia la Sostenibilidad y desplegara un conjunto de programas encaminados a mejorar la sostenibilidad de la ciudad y calidad de vida comunitaria.
No obstante, una mirada a los debates previos a la Cumbre de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP21), que se celebrará este año en París, ya apunta a que los compromisos y las medidas adoptadas hasta ahora no vienen siendo suficientes para lograr el objetivo de limitar, para final de siglo, el aumento de la temperatura en dos grados centígrados, con respecto a los niveles preindustriales. Y es en esta perspectiva donde se sitúa la Estrategia municipal, fijándose para 2030 la meta de reducir en un 30 % las emisiones de CO2 generadas, teniendo como año base 2007, pasando así de 6,1 a 4,3 toneladas de CO2 equivalente por habitante/año.
Para ello, será preciso seguir actuando para favorecer la movilidad sostenible tanto en el transporte de personas como de mercancías, desincentivando el uso del vehículo privado motorizado; continuar mejorando en la eficiencia energética de las viviendas, edificios y actividades económicas e incrementar la generación energética renovable; producir menos residuos e incrementar su recogida selectiva. La calidad de vida y salud de las personas es un eje transversal y el punto de análisis de todas las acciones a llevar a cabo en la ciudad; la contratación pública se viene perfilando como una herramienta eficaz para generar ofertas más ecológicas y socialmente justas. El cuidado de los hábitats naturales, ampliando su protección y biodiversidad como elemento estratégico en la conservación y revalorización del territorio. Un amplio abanico de acciones necesarias, en el que el compromiso de la ciudadanía, de todas y cada una de las personas que vivimos en San Sebastián, es fundamental.
El tránsito hacia la sostenibilidad no está garantizado, no es el desenlace lógico de las tendencias en juego. Implementar las medidas establecidas en los planes y programas aprobados para mitigar los efectos del cambio climático no está siendo garantía de ello. El cambio climático ha llegado para quedarse y las medidas para adaptarnos a él son una asignatura pendiente.